domingo, 8 de enero de 2012

Así lo manifestó el ministro de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente, quien defendió las actualizaciones tarifarias en Assa y en la Empresa Provincial de la Energía.  


Cualquier gobierno es aumentar impuestos o tarifas en los servicios esenciales. Se trata de un costo político que la provincia no dudó en asumir para poder garantizar la producción y suministro de agua potable y electricidad, respectivamente. En tal sentido, el ministro de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente, Antonio Ciancio, explicó cuáles son los condicionantes que llevaron al Estado a aumentar los precios en la EPE y en Assa.
"La situación se puede mirar desde múltiples aspectos: por un lado hay una demanda creciente del consumo de los servicios, en el caso de la energía eléctrica es fantástico, porque al día de hoy estamos entregando un 50 por ciento más de energía que hace cuatro años. Por otro lado, cada día que pasa los equipos y las instalaciones son más obsoletas. Hace unas horas, nada más, sacamos un cable de alimentación en Rosario que era de 1928", explicó el funcionario a Diario UNO.

"En ese contexto, aparece una discusión que nosotros llevamos en las audiencias públicas por el aumento del agua cuando se nos piden obras, y es que para cumplir con ese objetivo se requiere tiempo y también recursos, que son finitos, acotados. Entonces, si no hay tarifas que se actualicen tampoco hay recursos para hacer obras y garantizar el servicio", añadió Ciancio.

-¿Y cómo se emplean esos recursos de la mayor recaudación?

-Los recursos están bien empleados, porque lo otro sería que uno está despilfarrando lo que recibe a través de los impuestos y de las tarifas; eso no está ocurriendo porque nosotros tenemos una clara visión de qué hacer con los dineros públicos y cómo manejar las finanzas de todos los santafesinos.

"Con esos dineros hemos hecho inversiones importantísimas en Assa, en la EPE, en el ministerio (de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente) con los acueductos, y esto requiere -también- el apoyo de la ciudadanía. Es evidente que pagar mil litros de agua, es decir un bloque de agua de un metro por un metro, por un metro, a sólo 63 centavos, es por lo menos injusto", graficó.

Además, Ciancio remarcó que "culturalmente", el Estado debe trabajar mucho más en educar a la población en el "buen consumo de los servicios", porque todos quienes viven sobre la margen del río Paraná "piensan que teniendo el agua tan cerca no debería tener un costo, pero lo que no saben es que al agua hay que fabricarla".

En relación a la electricidad, Ciancio indicó que "transportarla a lo largo y lo ancho de la provincia de Santa Fe, a través de 50 mil kilómetros de líneas que tiene la EPE, es un esfuerzo monumental para el Estado, para la empresa y, fundamentalmente, para los trabajadores". Además, aparece otro elemento en la consideración técnica del suministro que complejiza el sistema eléctrico santafesino: las distancias.

"No es lo mismo -continuó- la energía en Santa Fe que en Capital Federal, donde en un sector geográfico muy pequeño hay más clientes que en toda nuestra provincia. Entonces, en Capital atender a los clientes, resolver la problemática de la obsolescencia de los cables, es mucho más rápido que hacerlo aquí".

El funcionario provincial consideró que así como el Estado y los empleados de la EPE aportan su capacidad para garantizar el servicio de electricidad, "también hay que tratar, delicadamente, de pedirle a la población que sea consciente en el uso de los recursos y, además, atender los costos de esos recursos. Es con esos dineros, que nos aportan a nosotros, que podemos hacer más obras", dijo.

 

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