La
conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente ha puesto
en marcha un programa de seguimiento de árboles monumentales en los
espacios protegidos de la Comunitat Valenciana, según ha informado el
director general de Medio Natural, Alfredo González.
Un programa que desarrollan los técnicos del Centro de Investigación y
Experimentación Forestal de la Comunitat Valenciana en colaboración con
el personal de los Parques Naturales con el objetivo de planificar la
gestión del árbol monumental, con planes bianuales y aumentar, así, la
longevidad de los ejemplares.
“Hasta el momento –ha continuado el director general- ya se han
realizado actuaciones en ejemplares de la Sierra de Mariola,
concretamente en la Carrasca del Mas de Galbis, en la Sabina de los
Responsos, en la Puebla de San Miguel y en el Paisaje Protegido del
Serpis, en la Carrasca de la Lorxa”.
“Estos monumentos naturales han sufrido y sufren las inclemencias del
tiempo, nevadas, vientos, compactaciones del suelo y las prácticas
tradicionales orientadas a la producción agraria o al aprovechamiento de
sus frutos de ahí que hayamos puesto en marcha este programa”, ha
asegurado González.
“Son árboles maduros y de considerable tamaño o altura, en los que el
riesgo de rotura de ramas se incrementa, se hace por tanto necesario
tomar medidas, desarrollando un programa de actuaciones a corto y medio
plazo, que aumente la longevidad de éstos ejemplares, estableciendo unas
prioridades de actuación y unas recomendaciones periódicas”, ha
significado Alfredo González.
Protocolo de actuación
Los técnicos realizan en primer lugar un diagnóstico visual del ejemplar, teniendo en cuenta que cada especie tiene su geometría característica. Se analizan los síntomas que afectan a la vitalidad del árbol, visible cuando disminuye el crecimiento primario de los brotes, y disminuye la proliferación de hojas, frecuente en árboles senescentes, ya que las ramas tiendan a disminuir su número y longitud.
Los técnicos realizan en primer lugar un diagnóstico visual del ejemplar, teniendo en cuenta que cada especie tiene su geometría característica. Se analizan los síntomas que afectan a la vitalidad del árbol, visible cuando disminuye el crecimiento primario de los brotes, y disminuye la proliferación de hojas, frecuente en árboles senescentes, ya que las ramas tiendan a disminuir su número y longitud.
La principal carga que actúa en el árbol es el viento, afectando
principalmente a árboles aislados, más expuestos a las corrientes. Por
último se analiza el entorno, tipo de suelo, estado de las raíces,
presencia de piedras….Llegado a este punto, los arboricultores realizan
un diagnóstico final del ejemplar mediante trabajos verticales.
“Las actuaciones que se han efectuado son apuntalamiento o soportes
en ramas, saneamiento de oquedades, limpieza de cortes, o podas de
aclareo, manteniendo siempre el principio de cautela y actuando lo
mínimo posible, para asegurar la supervivencia de los ejemplares”, ha
asegurado González.
Actuaciones en las Sabinas de la Puebla de San Miguel
En la actualidad, se están realizando los trabajos de recuperación de dos de los ejemplares monumentales del Parque Natural de la Puebla de San Miguel, la “Sabina de la Valbuena” y la “Sabina Benjamín”. Concretamente se han iniciado la fase de la eliminación y saneamiento de ramas secas y de ramas entrecruzadas con heridas y en la eliminación de tocones excesivos producidos por antiguas podas. En la primavera próxima, después de la pausa invernal, se reanudarán los trabajos sobre el resto de ejemplares.
En la actualidad, se están realizando los trabajos de recuperación de dos de los ejemplares monumentales del Parque Natural de la Puebla de San Miguel, la “Sabina de la Valbuena” y la “Sabina Benjamín”. Concretamente se han iniciado la fase de la eliminación y saneamiento de ramas secas y de ramas entrecruzadas con heridas y en la eliminación de tocones excesivos producidos por antiguas podas. En la primavera próxima, después de la pausa invernal, se reanudarán los trabajos sobre el resto de ejemplares.
Los sabinares albares son bosques abiertos de montaña que ocupan
hábitats continentales secos con clima extremo y con suelos pobres y
pedregosos. En la Comunitat Valenciana su presencia queda limitada a la
alta Serranía del Túria, al Rincón de Ademúz, la Sierra del Toro y a la
zona dels Ports-Maestrat
“El conjunto de sabinas monumentales, casi milenarias, del Parque
Natural de La Puebla de San Miguel, constituye una de las muestra más
sobresalientes de esta antigua especie de conífera mediterránea. Un
valioso patrimonio de carácter natural y cultural”, ha asegurado el
director general.
Algunos de estos grandes ejemplares han sufrido con el tiempo roturas
de ramas y desgajes en el tronco, lo que en algunos casos ha generado
copas descompensadas y ramas principales que se entrecruzan o rozan y
son fuente de heridas, que ahora se van a recuperar.
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