La primera fase de la laguna para el tratamiento
de los residuales de la Unidad Empresarial de Base industria Carlos
Manuel de Céspedes, en el municipio
camagüeyano de igual nombre, se entregó al cierre del 2011, con lo que
se garantiza que no se viertan al río Mala Fama los desechos del proceso
fabril de ese ingenio azucarero.
Javier Cordero Piñeiro, director de la referida entidad, explicó que a partir de la incorporación del central a la zafra, el venidero 13 de enero, los residuos podrán reutilizarse, luego de su descontaminación, como fertilizantes y para el riego de áreas agrícolas.
“El vertimiento de desechos al río era un problema casi desde el mismo surgimiento del ingenio -que data aproximadamente de la década del ´20 del pasado siglo-, y entre las sustancias que emanaban se encuentran residuos de cachaza y del lavado de equipos con cierto contenido de ácidos.
“Como la capacidad de la anterior laguna de oxidación era muy poca, cuando se rebasaba su volumen, todo iba a para a dicha fuente fluvial, lo que traía como consecuencia un negativo impacto medioambiental”, explicó Cordero Piñeiro.
Héctor Rodríguez, jefe de la obra, agregó que el proyecto cuenta con un financiamiento superior al medio millón de pesos en moneda nacional y que se realizó un movimiento de tierra de 11 mil metros cúbicos, por concepto de excavación solamente, con ahorro de combustible y presupuesto lo que no afecta en ninguna medida la calidad.
Aún resta la segunda etapa, con fecha tope el 20 d enero y en la que deberá completarse la tercera piscina de evacuación de residuales.
No obstante con lo hecho hasta ahora se gana el margen suficiente para que la Unidad Empresarial de Base industria Carlos Manuel de Céspedes, se incorpore a la actual zafra azucarera y destierre el daño que anteriormente ocasionaba el entorno.
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